NUTRICIÓN CLÍNICA Y MEDICINA ESTÉTICA EN SEVILLA

VitaSane nace a finales de 2011 con una idea clara, ofrecer un servicio nutricional profesional y de calidad, apostando por mejorar la salud de las personas a través de una alimentación sana y equilibrada.

Nuestro afán por mejorar y poder ofrecer a nuestros pacientes una atención más amplia y personalizada han hecho que posteriormente se fueran añadiendo servicios complementarios al tratamiento nutricional, como el programa D+E, la psiconutrición y recientemente el servicio de medicina estética para ayudar a solventar aquellos problemas estéticos donde es difícil llegar sólo con dieta y ejercicio.

Desde VitaSane queremos ayudarte, para ello te ofrecemos tratamientos innovadores, eficaces y seguros, guiados por un equipo de profesionales altamente cualificados.



martes, 20 de diciembre de 2011

PAUTAS PARA UNA DIETA SANA Y EQUILIBRADA


La alimentación tradicional de los españoles se basaba en el consumo de alimentos saludables que contribuían a la prevención de enfermedades a largo plazo: se tomaban muchos cereales (sobre todo integrales) y muchas legumbres, frutas, verduras y hortalizas; el consumo de lácteos, carnes y pescados, era moderado; se utilizaba aceite de oliva para cocinar y aliñar, y se bebía vino tinto en las comidas. Esta dieta era lo más parecido a lo que llamamos «dieta mediterránea», cuyas bondades para nuestra salud, combinada con otros hábitos de vida saludables (hacer ejercicio físico a diario, un consumo moderado de alcohol y no fumar) están más que demostradas. Sin embargo, nuestras costumbres han cambiado mucho, en parte debido a la mayor diversidad de productos que hay en el mercado, y en parte a los cambios socioculturales y laborales.

Entonces, ¿ Cuáles son las CLAVES ?

Es conveniente

Ajustar la cantidad que comemos al gasto energético que tengamos, lo que bastará para mantener el peso apropiado.
Dar preferencia al aceite de oliva sobre otras grasas.
Tomar todos los días algo de pan y un plato principal compuesto de patatas, arroz o pasta.
Tomar todos los días un plato principal y una guarnición a base de verduras.
Consumir tres veces a la semana un plato de legumbres.
Comer al menos tres piezas de fruta al día.
Tomar productos lácteos a diario (un vaso de leche, un yogur o una porción de queso).
Beber cada día entre 1,5 y 2 litros de agua.

No conviene

Consumir alimentos azucarados a diario.
Tomar en una misma comida o cena sendos platos de pescado y carne, pues supone un aporte excesivo de proteínas.
Consumir más de cinco huevos a la semana (incluyendo el huevo que puedan contener los platos preparados, las salsas, los rebozados, los productos de bollería…).
Abusar de bebidas alcohólicas (se considera aceptable un poco de vino para acompañar las comidas principales).
Tomar más de seis gramos diarios de sal.

Fuente:
-Comer sano es fácil. Consejos para cuidar su alimentación. OCU Ediciones.

lunes, 19 de diciembre de 2011

LA IMPORTANCIA DE LA NUTRICIÓN EN EL DEPORTE


La Nutrición es una disciplina de las ciencias de la salud que ha pasado por grandes avances científicos en los últimos años. En términos generales el profesional de la nutrición puede actuar en distintos ámbitos: clínica (hospitalaria), administrativa (cocinas industriales, catering), preventiva (atención primaria), marketing (venta de productos), y deportiva (actividad física en general y deportes).

Particularmente la Nutrición Deportiva, impulsada por el fenómeno deportivo de alto rendimiento moderno, ha dejado de ser una práctica especulativa a ser un área del conocimiento que cuenta actualmente con numerosos estudios e investigaciones que compraban su importancia, además de orientar los procedimientos que los profesionales deben adoptar.

Las recientes descubiertas comprueban que una dieta adecuada proporciona la optimización del rendimiento atlético, y también nos permite elegir una conducta alimentaria (nutricional) más adecuada a los diferentes tipos de actividad física y deporte, sea en el ámbito recreativo o profesional.

Respecto a los deportistas, según Maughan (2001), sin una nutrición adecuada el atleta no podrá alcanzar su máximo rendimiento, y además este deportista no podrá mantener su condición atlética como se debería. También es cierto que la recuperación del esfuerzo y de lesiones será más lenta, y que el deportista está más susceptible a injurias y infecciones.

Ya no es un misterio que los deportistas son personas que presentan necesidades nutricionales especiales, sea con respecto a la calidad y la cantidad nutricional. También es cierto que cada modalidad deportiva y intensidad de entrenamiento va a exigir una dieta específica para suplir las necesidades generadas. Sin embargo, nos podemos preguntar: ¿cuáles son los nutrientes que realmente debemos utilizar o añadir en la dieta del deportista?

Lo primero que debemos tener en cuenta para elaborar una dieta, es el tipo de deportistas que estamos tratando, hay que considerar la edad, sexo, composición corporal, etc. A continuación debemos conocer el tipo de actividad que está desempeñando, la fase de entrenamiento (preparatoria, competitiva, descanso, manutención, etc.), la intensidad del entrenamiento (días de entrenamiento semanales, volumen de horas diarias, tipo y intensidad de los ejercicios – técnicos, tácticos, etc.).

Evidentemente existen otros aspectos más específicos y no menos importantes, que no citados aquí, y que también influyen en el momento de establecer una dieta a un deportista (o equipo), como por ejemplo, los aspectos relacionados con hábitos culturales de alimentación, local de entrenamiento y competición, clima, altitud, etc.

Con todo, a partir de estos principios básicos ya podemos seguir con la discusión. La composición de la dieta puede ser dividida en dos grandes grupos: los macronutrientes y los micronutrientes. El primer grupo incluye los carbohidratos, lípidos (grasa) y proteínas. Ya el según las vitaminas, minerales y oligoelementos.

En general la composición de la dieta de un atleta, aparte de tener necesidades calóricas aumentadas, es levemente diferenciada a una persona “normal”: unos 60 a 70% compuesta de carbohidratos (de preferencia las integrales, o sea, complejos); 20-25% de grasa (evitando las saturadas), 10-15% de proteínas (de alto valor biológico). El aumento del aporte energético debe ser realizado de forma proporcional y cuidadosa.

No podemos olvidar de la hidratación. La hidratación debe ser suficiente para reponer el agua y los sales minerales perdidos con el esfuerzo, y debe ser realizada en diversos momentos a lo largo del día, principalmente durante y después de los entrenamientos.

El tema de suplementación debe ser cuidadosamente tratado. En los últimos años, principalmente en virtud de la carga publicitaria asociada a una intensa campaña pró suplementos, ha generado un aumento en su consumo tanto dentro de los gimnasios (de mantenimiento) como en los clubes de alto nivel.

Sin embargo, lo ideal es que el deportista obtenga todas sus necesidades a través de buenos hábitos alimentarios tanto cualitativamente cuanto cuantitativamente, y solamente en casos específicos y particulares debe existir una suplementación (sea de carbohidratos o proteicas – creatina y otras substancias). Lo más importante es que cualquier tipo de suplementación debe ser prescrita bajo la aprobación y supervisión del equipo médico y nutricional.

Fuente:
Dra. Mª Luisa Belloto. www.mlbellotto.com

domingo, 18 de diciembre de 2011

La alimentación de los padres y madres antes y durante el embarazo podría influir en el estado de salud futuro de los hijos



Este asombroso titular resume algunas conclusiones que se están alcanzando en el mundo de la epigenética, una ciencia que estudia cambios en la expresión de los genes y que no tienen su origen en el ADN. Como la explicación de este fenómeno es bastante complejo intentaré explicarlo de la forma más sencilla posible, haciendo hincapié sobre todo en cómo se puede ver afectado el estado de salud futuro de los hijos, en función de la alimentación que llevaron sus padres durante su gestación.

Los antecedentes de estos estudios comenzaron durante el último año de la II Guerra Mundial. Holanda vivió una de las mayores hambrunas ocurridas en un país moderno y desarrollado. Aquellas mujeres que estaban embarazadas durante la hambruna dieron a luz niños que como promedio presentaron bajo peso, los cuales durante su vida adulta desarrollaron con mayor frecuencia problemas como diabetes, hipertensión arterial, obesidad o enfermedad cardiovascular. Pero lo más sorprendente es que los hijos de éstos, que también fueron estudiados, igualmente nacieron con bajo peso con respecto a la media, presentando los mismos problemas de salud que ya sufrieron los padres -aunque ligeramente atenuados-. Esto apoya la hipótesis de que las madres embarazadas durante la hambruna sufrieron cambios epigenéticos. Curiosamente, la lista de descubrimientos asociados a este trágico episodio histórico no acaba aquí. Por ejemplo, también se observó que aquellas embarazadas que pasaron su segundo trimestre de embarazo durante la hambruna tuvieron hijos que con mayor frecuencia presentaban personalidad esquizotípica, problemas neurológicos y esquizofrenia, lo que apoya la teoría del neurodesarrollo en la génesis de esta última enfermedad. Otros estudios más recientes en modelos animales están apoyando estos hallazgos. Pero además, un estudio publicado el año pasado en la revista Nature mostró en un modelo animal cómo la alimentación de los padres afectaba de igual forma al estado de salud futuro de sus hijos.
Después de esto nos podemos hacer una idea de la importancia de los hábitos de la madre durante el embarazo, y de la trascendencia de su dieta en la salud futura del niño que gesta. 

La conclusión de este artículo no es otra que la importancia de llevar una alimentación controlada, equilibrada y saludable, tanto por el padre como por la madre, antes y durante el embarazo, con el fin de de asegurar que el feto tenga constantemente todos los nutrientes necesarios para desarrollarse de la manera más idónea posible.
Para terminar os adjunto este video que espero os aclare algo más sobre la epigenética y cómo la alimentación puede modificar nuestra información genética.



Fuente:
  

miércoles, 14 de diciembre de 2011

XIV Día Nacional de la Persona Obesa


Me ha llamado la atención hoy un artículo publicado en el Diario Médico por Isabel Gallardo titulado: "Obesidad y sueño, un camino de doble dirección" y es que como vemos, hoy se celebra este día con las espeluznantes cifras de obesidad que afectan a un 23 por ciento de la población adulta española y casi el 20 por ciento de los niños y adolescentes españoles. Además, esta patología, que se ha venido a llamar la epidemia del siglo XXI, tiene una estrecha relación con la aparición de enfermedades cardiovasculares, y su presencia se asocia cada vez más con la privación de horas de sueño, a causa de los malos hábitos, el estrés y el ritmo de vida moderno. 

Con esta breve alusión a la publicación del diario médico explicaré a continuación qué es la obesidad, qué riesgos acarrea a la salud, algunos datos estadísticos y finalmente cómo prevenirla.

Actualmente la OMS define la obesidad como a una acumulación excesiva de grasa corporal, y se mide por el índice de masa corporal (IMC), según el cual una persona con un IMC mayor a 30 kg/m2 es obeso/a.

La obesidad es consecuencia de múltiples factores, citandose como posibles agentes principales el estilo de vida (mala alimentación, sedentarismo, depresión, etc) y la genética.

Las enfermedades que se ven potenciadas o en ciarta medida inducidas por la obesidad son múltiples, pero entre ellas podemos citar como de mayor impacto sobre la salud y la sociedad las enfermedades cardiovasculares, dislipemias, cáncer, apnea del sueño, diabetes, hipertensión y el síndrome metabólico.

En el periódico citado anteriormente se le ponen las siguientes cifras a la obesidad:

- La obesidad afecta a 150 millones de adultos -20 por ciento de la población- y 15 millones de niños en Europa -10 por ciento de la población del continente-.
- En torno al 23 por ciento de la población española mayor de 18 años es obesa, según el estudio Enrica.
- La obesidad está presente en el 35 por ciento de los mayores de 65 años. 
- La diabetes, la hipertensión arterial, la hiperlipemia, la colelitiasis y la apnea del sueño aparecen tres veces más en las personas con obesidad y eleva el riesgo de padecer algunos tipos de tumores, como el de mama y el de colon. 
- En niños, dormir 5 ó menos horas diarias casi duplica el riesgo de ser obeso en la vida adulta.
- Dormir entre 5 y 6 horas diarias en comparación con 8 horas se asocia con un riesgo dos veces mayor de desarrollar diabetes y una mayor prevalencia de hipertensión arterial.
- El principal factor de riesgo de dormir pocas horas se asocia con la hipersomnia diurna y, por extensión, con un mayor riesgo de accidentes.
- La Organización Mundial de la Salud estima que 41 millones de personas fallecerán por patologías crónicas relacionadas con una alimentación inadecuada, el consumo de tabaco y la falta de actividad físca en 2015.

Personalmente, considero que la prevención de la obesidad debe empezar desde la edad infantil, ya que es la etapa de la vida donde el aprendizaje es más activo y en consecuencia se adquieren lo hábitos alimentarios que marcarán de por vida la forma de alimentarse del individuo. Pero, en el caso de que no disfrutemos de la ventaja de ser niños, lo importante será llevar a cabo una alimentación saludable y equilibrada, que aporte todos los nutrientes esenciales y que evite otros que en exceso pueden hacernos engordar. 

Si deseas saber cómo llevar una dieta sana y equilibrada busca en este blog, porque seguro que lo encontrarás.
















martes, 25 de octubre de 2011

Mitos y falsedades sobre la ingesta de fibra

Un exceso de fibra puede ser tan perjudicial como una carencia. El nutricionista Carlos Palomo explica qué es la fibra, para qué sirve y cómo obtener la dosis recomendada

 

No es aconsejable abusar de los alimentos con fibra enriquecida

El nutricionista Carlos Palomo Sánchez, junto a algunos alimentos que contienen fibra natural. CALLEJA 

M. C. GARDE . PAMPLONA Lunes, 8 de noviembre de 2010 - 04:00 h.

LA ingesta de fibra es necesaria para nuestro organismo. En los últimos tiempos, ha crecido notablemente la publicidad de productos enriquecidos con fibra y de sus cualidades. Sin embargo, para valorar su importancia en nuestra dieta es necesario saber qué es la fibra, para qué sirve, cuánta hay que tomar y, lo más importante, cómo se puede alcanzar esa cantidad diaria.

El nutricionista y máster en Alimentación, Nutrición y Metabolismo, Carlos Palomo Sánchez, explica que la fibra dietética es, de forma sencilla, un conjunto de sustancias de origen vegetal y, por tanto, están presentes sobre todo en alimentos vegetales. 

DOS TIPOS DE FIBRA
 
Aunque hablamos de fibra en singular, realmente existen dos tipos de fibra. Por un lado, la fibra insoluble. Es una fibra que el organismo no puede digerir en su práctica totalidad. Este tipo de fibra facilita la excreción de alimentos y, por tanto, ayuda a combatir el estreñimiento. ¿Dónde la podemos encontrar? Está en la piel de las frutas y hortalizas, en las verduras, en la cáscara de algunos frutos secos y en la mayoría de productos integrales (pan, cereales, etc). 

Por otro lado, está la fibra soluble. Aumenta la sensación de saciedad, dificulta la absorción de grasa y colesterol y ralentiza la absorción de azúcares. "Tras su degradación en el intestino da lugar a unas sustancias que ayudan a mantener en un estado óptimo las células del colon, por lo que ayuda a la prevención del cáncer en esa zona del cuerpo". La fibra soluble está presente principalmente en las legumbres, frutas y verduras. 

En conclusión, las frutas y verduras proporcionan los dos tipos de fibra. Sin embargo, en general, las legumbres son más ricas en fibra soluble y los frutos secos en fibra insoluble. 

Como consecuencia de estos efectos beneficiosos, el nutricionista señala que la fibra contribuye a mejorar enfermedades tan prevalentes hoy en día como la obesidad, la diabetes y el estreñimiento, así como también la diverticulosis y la hipercolesterolemia. 

CANTIDAD DIARIA
 
Los expertos recomiendan tomar entre 25 y 30 gramos al día de fibra. Esta cantidad se puede alcanzar con cinco raciones de frutas y verduras al día, el consumo diario de pan o cereales (mejor integrales) y al menos dos veces a la semana legumbres. 

A pesar de estos efectos beneficiosos, el exceso de fibra también tiene sus inconvenientes, ya que un abuso de fibra reduce la absorción de algunos minerales importantes para el organismo como el calcio o el hierro y genera flatulencia. "El exceso es tan perjudicial como la carencia. Hoy la gente está cada vez más preocupada por la alimentación y recurre con mayor frecuencia a alimentos enriquecidos en fibra, lo que resta protagonismo a los alimentos tradicionales y menos procesados. Los alimentos enriquecidos son buenos pero si se lleva una alimentación sana no hay que recurrir con frecuencia a ese tipo de alimentos. Además, no hay que olvidar que son alimentos más caros". A continuación, el nutricionista aclara ideas extendidas sobre la fibra. 

1. "La fruta y la verdura tienen mucha fibra". Realmente, las frutas y hortalizas no poseen grandes cantidades de fibra por unidad, pero en su conjunto ( cinco raciones al día entre frutas y verduras) contribuyen en gran medida a alcanzar diariamente la dosis recomendada. Además , las frutas y verduras nos aportan otros nutrientes esenciales para mantener un estado de salud óptimo. 

2. "Cuanta más fibra mejor". Un exceso de fibra puede ocasionar mala absorción de algunos minerales, tales como el hierro o el calcio, además de ocasionar incómodas flatulencias. Por eso, no hay que "obsesionarse" con la necesidad de fibra. 

3. "La fibra sirve sólo para el estreñimiento". Es cierto que la fibra ayuda a regular el tránsito intestinal, pero además de ser un remedio contra el estreñimiento puede contribuir a mejorar otra serie de enfermedades importantes hoy en día tales como la diabetes, la obesidad y la hipercolesterolemia. 


FUENTE ORIGINAL:

Próxima Apertura

Próximamente abrirá sus puertas VitaSane, poniendo a tu disposición las herramientas más punteras en nutrición y el conocimiento más innovador y reciente para ayudarte a que consigas mejorar tu salud o tener ese cuerpo que siempre has deseado.

En VitaSane te ofrecemos:

Asesoramiento profesional de la mano de un titulado universitario en nutrición humana y dietética 

Dietas de adelgazamiento 

Dietas para musculación 

Dietas para deportistas 

Dieta genética 

Dietas contra la obesidad infantil 

Dieta para el embarazo 

Dietética para alergias e intolerancias alimentarias 

Vegetarianos 

Dietética especializada en diabetes, enf. Renal, patología cardiovascular, colesterol/triglicéridos, hipertensión, ácido úrico y problemas dijestivos 

Nutrición deportiva